“En química, la dilución es la reducción de la concentración de una sustancia química en una disolución. En economía se conoce como efecto dilución la bajada de precio que sufren las acciones de una empresa derivado de una ampliación de capital”.
El tradicional suplemento de vinos del DIARIO LARIOJA , trata esta edición el principal debate actual del sector, el cual define como : “Las comarcas geográficas, los vinos de pueblo y de finca son una realidad histórica en Rioja que empieza a reclamar el protagonismo que el innegable modelo de éxito de una denominación ‘única’ había dejado en segundo plano”.
“Prestigiosos expertos realizan una selección básica de comarcas vitícolas (habría varias más, incluso subdivisiones por delimitar) que contribuye a rescatar de la memoria la autenticidad de vinos que no entienden de fronteras políticas y administrativas, sino de microclimas, suelos, variedades y prácticas culturales, es decir, de los propios terruños”.
Son muchos los que claman por la diferenciación:
Algunos incluso, le quieren poner banderas:
Ibarretxe plantea una nueva denominación ‘Nabarra’ para el vino de la Rioja Alavesa
Sin embargo las principales actuaciones de la DOC apuntan en la dirección opuesta.
Rioja asumirá la próxima vendimia un ‘extra’ de hasta 27 millones de litros de vino
El potencial vitícola de Rioja crecerá en 387 hectáreas para el 2016 (0,6%). Dicha cifra se repite inicialmente para 2017 y 2018, aunque, si las ventas aumentan en términos interanuales por encima del 1%, el aumento de masa vegetal será de 645 hectáreas en lugar de las 387 iniciales (1%). Así, se plantarán entre 1.161 hectáreas y 1.677 en el trienio.
Pero se introdujeron también los rendimientos de campaña en la negociación (las nuevas plantaciones no entran en producción hasta el cuarto, quinto y sexto año). Así las cosas, de golpe, la próxima vendimia podría traer hasta 27 millones de litros de vino ‘extra’ al abrirse el ‘grifo’ tanto en campo (107% para variedades tintas) como en bodega (el rendimiento de transformación pasa del 70 al 72%).
Mientras tanto, en linea con lo publicado anteriormente, leo noticias sobre como
Las ventas de vino a granel se han incrementado más de un 200% al partir en el año 2000 de poco más de 19 millones de hectolitros. El precio medio ha pasado de 0,61 a los 0,71 euros actuales, aunque en 2013 hubo un repunte, por la escasez de cosecha a nivel mundial, que le llevó hasta los 0,81 euros.
Entre los grandes vendedores, encabeza la lista España con más de 23 millones de hectolitros, de los que 14 millones, alrededor del 55%, son de vino a granel; exactamente el mismo porcentaje que vende Australia y menor que el 60% que alcanza Sudáfrica en las ventas exteriores.
Otros grandes vendedores de vino a granel son Estados Unidos que ya alcanza el 44% de sus ventas y Chile con el 42%, mientras otros países como Francia y Portugal, que apenas venden en este segmento entre un 22% y un 28%, compran y reexportan vinos a granel de otros países, especialmente de España.
El vino a granel tiene dos caminos diferenciados al que deben acogerse los países productores, especialmente España. Por un lado, el menos rentable, las ventas a aquellos países que adquieren el granel para reexportarlo (Francia, Italia y Portugal entre otros) y por otro lado, el más interesante, el que va a destinado a consumidores y distribuidores directos (Reino Unido, Estados Unidos, Canadá o China).
Francia, con la región Languedoc Rosellón al frente, apuesta de forma decidida por un tipo de vino que, en determinados supuestos, puede ser más rentable que el envasado o el espumoso merced a sus menores costes.
Por otra parte tenemos la inestimable opinión de Salvador Manjón,
¿Adónde vamos con estos precios?
Vendemos la uva por debajo de sus propios costes de producción, nuestros vinos son los más baratos del mundo y nuestras exportaciones van encaminadas a llenar las botellas de aquellos a quienes aspiramos a sustituir en los mercados internacionales.
Pero tampoco hay que perder de vista la evolución que el sector ha tenido en las últimas décadas, donde la tecnificación en los viñedos, en buena parte gracias a las ayudas europeas con los planes de reconversión y reestructuración, ha hecho posible el milagro de los panes y los peces. Es decir, perder un treinta por ciento de la superficie y aumentar la producción en unos porcentajes similares. Lástima que ese milagro no haya tenido su traslación a los precios, cuyos valores unitarios apenas han disfrutado de algún pequeño incremento, motivado por los vaivenes de las cosechas (por otra parte cada vez más homogéneas).
¿Hacía donde vamos entonces?
Pues no quiero profetizar, pero el concepto Rioja se diluye. En unos años veo la Rioja como proveedora mundial de millones de litros de vino barato, eso si con renombre y calidad contrastada. Mientras algunos pocos, con el suficiente ingenio, dinero, trabajo y/o suerte, conseguirán tener sus marcas bien situadas en los mercados y en el inconsciente colectivo, consiguiendo venderlos con márgenes interesantes. Pero solo unos pocos
Comentarios recientes